A veces también hay historias con final feliz

El seguimiento más exhaustivo que se puede realizar de las águilas marcadas con emisores permite disponer muchas veces de información muy detallada de su vida cotidiana y, por lo tanto, también de aquellos problemas que les afectan. Durante este último periodo de cría se han podido conocer diferentes historias que ponen de manifiesto el drama de la lucha por la supervivencia diaria.

Por ejemplo, se han conocido dos casos de territorios con ejemplares marcados con emisores en que el macho ha desaparecido y la hembra se ha quedado sola en el preciso momento que tenían que nacer los pollos. La ausencia de un compañero que le proporcionase alimento y protección planteaba, pues, un dramático dilema para la hembra: tenía que escoger entre quedarse en el nido incubando y protegiendo los huevos o marchar lejos a cazar para poder saciar el hambre.

Por este motivo, se decidió proporcionar alimentación suplementaria a las hembras de estos territorios, con la esperanza que eso permitiese la supervivencia de los pollos. Estas acciones se realizaron de manera coordinada con el Cuerpo de Agentes Rurales de la Generalitat de Catalunya y con los guardas del Servicio de Parques Naturales de la Diputación de Barcelona. Gracias a eso, en los dos territorios llegó en nacer un pollo. En uno de ellos, desgraciadamente, el pollo debía de estar muy débil y murió al cabo de unos días, pero en el otro la alimentación suplementaria ha permitido que el pollo crezca con normalidad y que estos días esté realizando sus primeros vuelos.

Es preciso, pues, felicitarse por esta colaboración que nos ha permitido poder explicar una historia con un final feliz.