Hilda Maria de Carvalho Braga
Doctoranda en Geografia Humana-UB Becaria CAPES

El trabajo de los badameiros: superando los umbrales de la miseria (Resumen)

Las actuales formas de reciclar la basura en los países latinoamericanos, se desarrollan con base en el trabajo informal de una población migrante y desempleada. Analizamos aquí el trabajo de esta población tomando como ejemplo el caso de Salvador de Bahia donde los badameiros, han sido integrados al programa municipal de la recogida selectiva. Así, la antigua práctica de recogida de las chatarras, hoy se ha expandido a otros materiales agregando una legión de trabajadores que viven de la segregación de estos residuos. Estos trabajadores no se incluyen en las estadísticas de la población urbana activa, formando parte de una creciente economía sumergida en los países en desarrollo. Además, esta población urbana y marginal consciente de su papel económico y ambiental, a través de su organización política en asociaciones y cooperativas, reivindican la necesidad de su reconocimiento profesional y la participación en los programas municipales de recogida selectiva. De esta manera, los factores que se consideran en este estudio hacen referencia a los cambios producidos en estas relaciones laborales propias y peculiares de las ciudades en los países en desarrollo.

Palabras llaves: basura, trabajo, reciclado, residuos urbanos, Salvador de Bahia

The badameiro's work: going beyond the poverty's limits (Abstract)

This paper analysis the ways of recycling the waste on the Latin America's Countries, taking the experience of Salvador's city where the badameiros were integrated to the municipal curbside program. Although the old practice of collecting metals have been expanded to others materials gathering a legion of workers that lives of scavenging the wastes. These picking workers are not included on the datas of productive urban population, being part of the increasing submerged economy of developing countries. This urban and marginal population are councious of the economic and environmental role, their political's organization as cooperative or association, reivindicate the necessity of profesional admission and participation on municipal curbside programs. In such a way the factors considered on this study refers to the changes produced on this working relations, that are propers and peculiar to the developing cities.

Key words: garbage, recycling job, recycled waste, urban waste, Salvador de Bahia

La urbanización en América Latina hizo despertar en el debate académico el trabajo de uno de los segmentos económicos más desprestigiados de la sociedad: los recogedores de basura. La cuestión ha sido tratado por cientificos sociales, ecologistas y administradores públicos que discuten la función y el papel de estos trabajadores en la gestión ambiental de residuos. Ante la necessidad de delinear una política pública de residuos, las cuestiones que se plantean con las nuevas estratégias de gestión ambiental de residuos son: como definir esta categoria laboral, como insertar esta categoria en el sistema de tratamiento de residuos urbanos. Además estos planteamientos nos lleva a reflexionar sobre la actividad en si misma como fenómeno urbano en su contexto geopolítico.

El sistema de reciclado en las ciudades latinoamericanas es practicado por personas que buscan una fuente de ingresos. Son trabajadores del servicio de limpieza, desempleados que rebuscan entre los desechos. Esta economía sumergida funciona sin control o ingerencia de las instancias legales es inestable y muy cambiante. Para estos trabajadores los ingresos recibidos por esta actividad son superiores a lo que recibirian en una actividad de la economía formal.

Con esta comunicación pretendemos contribuir al debate respecto a la participación de los distintos actores sociales en los procesos de innovación social en el trabajo. En esta perspectiva trataremos de situar la política del reciclado, a partir de las experiencias que se realizan en el país, tratando de caracterizar el papel que desarrolla la actividad en la gestión de residuos. El analisis del sistema de recogida selectiva en Salvador permite concluir que el desafio que se impone a la gestión de los residuos es la integración de distintos actores sociales. Consideramos que los riesgos para la salud y la necesidad de generar empleo y renta son los dos factores considerados en el analisis que justifica la mayor y amplia participación de los actores sociales y que permitiria sobrevenir una innovación social.
 

La geografia política del reciclado

La actual exigencia de un "desarrollo sostenible" ratificado por los gobiernos en varias conferencias internacionales configura un desafio para el nuevo orden mundial. El informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) publicado en 2001 pone enfasis en la tecnología como instrumento para el desarrollo humano, destacando entre sus objetivos la necesidad de orientar la política pública a que los posibles beneficios tecnológicos estén dirigidos para potenciar a la población y ampliar las opciones de su vida cotidiana. Según este mismo informe los cambios tecnológicos se está produciendo más rapidamente en los países en desarrollo que están menos sometidas a los intereses particulares por las tecnologias del pasado. Mientras algunos sectores económicos asoman con tecnologías punta, otros conviven con métodos y equipos artesanales desarrollandose en condiciones ambientales insalubres utilizando como mano de obra una población pobre y marginal. Pero hacer frente a la creciente marginalidad, violencia y desempleo urbano que hoy en día caracteriza a las grandes ciudades iberoamericanas, es uno de los desafios para estos países que han buscado estrategias para el desarrollo humano y sostenible de estas poblaciones.

La necesidad de cambiar las actuales condiciones ambientales en los vertederos se ha presentado en algunas ciudades donde las administraciones locales con el apoyo de ambientalistas y organizaciones no gubernamentales pasaron a organizar esta categoría laboral. La alternativa de concretar estas iniciativas y revindicaciones socio-económicas a partir de la organización en asociaciones y cooperativas ha resultado en beneficios para esta población. Se está proponiendo que la política nacional de residuos reconozca y defina el trabajo de seleccionador de la basura en la recogida, comercialización y reciclaje de materiales orgánicos e inorgánicos y en la educación ambiental, a la vez que estimule la creación de cooperativas autónomas de seleccionadores. Esto sin duda sería un avance social muy grande ya que cambiaría mucho la forma en que se producen estas relaciones socio-laborales y los procesos productivos.

La dimensión social del problema asumió tales proporciones que algunas acciones institucionales han tratado de intervenir con la eliminación de la presencia de niños en los vertederos. La preocupación por el tema llevó a constituir el Programa Fórum Lixo e Cidadania bajo la coordinación de la UNICEF. Este programa tiene por objetivo retirar a los niños del trabajo de recogida en los vertederos ingresándoles en las escuelas con la ayuda de una beca. El Programa desarrolla actividades de promoción social de los seleccionadores en los municipios brasileños.

No obstante los riesgos para la salud son grandes debido a los frecuentes accidentes con cortes. Estos riesgos fueron analizados por Susan Cointreau (1999) en una reciente investigación. En ella se presenta una evaluación de la literatura epidemiológica, que ha comprobado en varios estudios la relación causal entre el trabajo en los vertederos y el aumento de las enfermedades infecciosas, respiratorias, alergías y cánceres en los países en desarrollo, lo que seguramente está acentuado por el hecho de que los vertederos municipales en su mayoría reciben los residuos industriales y médicos. Los datos presentados por la investigadora son alarmantes y concluyentes respecto a la forma insalubre en que se realiza la actividad.

La basura en las manos de los badameiros adquiere un valor de uso y un valor de cambio transformando los residuos en mercancía que es recogida, consumida y vendida. Marcia Gomes & William Hogland (1996) investigaron la actividad de los seleccionadores de basura en el vertedero de Rio de Janeiro considerándola como una forma de producción no capitalista relacionada con el sector capitalista a través del mercado. Según esta investigación el trabajo de recoger los materiales se produce sólo en las siguientes condiciones socio-económicas: la existencia de un mercado para los materiales recuperados; un significativo volumen de producción de residuos para la demanda industrial; una población que necesita trabajo y se somete a bajos ingresos y a los riesgos de la actividad.

Este estudio realizó la caracterización socio-económica de 112 seleccionadores en el vertedero en Rio de Janeiro con más de 14 años de actividad y reveló los bajos níveles educacionales y de calificación profesionales con la mayor frecuencia de analfabetos. Muchos de ellos(35%) son jóvenes que se encuentran en la franja de edad de 31 a 45 años y trabajan con otros miembros de la familia, a veces toda la familia. Los seleccionadores recogen los más distintos materiales, que sirven tanto para consumo própio como para la venta. La mayoría de ellos evaluan positivamente la actividad por lo que perciben con la venta de los reciclados, con una productividad media de 268 kg/dia.

Gabrielli Grossi (1998) en su estudio sobre los badameiros en el vertedero de Salvador de Bahia define que esta actividad de "coleta urbana" está integrada en el proceso de producción, circulación industrial y comercial de los grandes centros urbanos. No obstante, posee las características de una economia de subsistencia: el autoconsumo y el producto excedente destinado al mercado. La actividad está más frecuentemente relacionada con una actividad de la economia sumergida e informal en la que los badameiros son sobreexplotados, sin tener los beneficios del mercado formal, venden la mercancía como contratantes libres, con ausencia de cualquier sistema de garantías y derechos sociolaborales. Desprovistos de cualquier representación legal de clase, se incluyen en una relación asimétrica perversa de poder económico: sin reconocimiento como categoría profesional, sin derechos de aceso a crédito, financiaciones y sin derecho al sistema de previsión brasileño.

La actividad de los badameiros no está inserta en una estructura jerárquica y formal, y tienen autonomia y libertad para adaptar su trabajo a la lógica del mercado a la hora de vender los materiales. Estos trabajadores son el eslabón más bajo de la cadena, desprovistos de información y conocimiento respecto al destino final de los materiales, así como de todo el proceso de reciclaje: los precios de mercado, la localización de las indústrias de reciclado. Así que la ausencia de jerarquía no los excluye de una sobreexplotación del trabajo. Los materiales recogidos son vendidos a los intermediarios que lo venden a la industria de reciclado (Grossi, 1998, p.115). La condición de balanceiros es el nível más elevado que pueden alcanzar los badameiros. Como resultado de un esfuerzo de capitalización, a partir de la inversión en un capital fijo: la propiedad de una báscula. Esta permite realizar las actividades de compra y venta y la intermediación a la industria.

El flujo económico local del reciclado es dependiente del sistema macroeconomico en el que la función de badameiros es apartada de influir en el valor de venta. Este es determinado por los balanceiros que tienen mayor control del mercado de reciclados y por esto actuan en el mercado como un cartel, al que se subordina la actividad de los badameiros. La industria del reciclado en general paga lo que determinan los balanceiros. En las relaciones entre balanceiros y badameiros los conflitos de intereses y las revindicaciones colectivas por mejores precios, revelan una visión fragmentada de la realidad que viven e impiden la defensa de sus propios intereses(Grossi, 1998, p. 118). Los badameiros integrados al sistema y marginalizados forman parte de un sistema capitalista perverso y sin saberlo están subordinados a una amplia jerarquía social.

Las condiciones en que se desarrolla la actividad de los badameiros en los vertederos resumidas por Gabrielli Grossi (1998), son: ausencia de acumulación de capital; baja circulación monetaria; bajos niveles educacionales y profesional; ausencia de condiciones higiénicas y de salud; exclusión de los derechos laborales; ausencia de organización sindical. Excluídos socialmente de la ciudadania, el autor comprueba que estos trabajadores tienen dificultad para vislumbrar alternativas posibles a las condiciones de existencia o para superar las dificultades y obstáculos económicos y sociales.

En todo el país las experiencias de acción comunitaria para el reciclado como fuente de ingreso y renta se ha producido en conjunto com diversas ONGs, organizaciones gubernamentales y apoyo de los sectores comercial e industrial. La experiencia en la ciudad de Assis, São Paulo, refleja una preocupación ambiental por los residuos, además de generar beneficios económicos. En dicha ciudad la administración municipal en conjunto con la universidad implantó el Parque de Reciclagem e Compostagem con una área de 15 mil metros cuadrados, el cual ha producido abono orgánico que es utilizado en la horticultura y cultivo de hierbas medicinales además del reciclado de los plásticos finos (Serpa. 1998). Para citar otro ejemplo, en Rio de Janeiro, desde el año 1993 instituciones gubernamentales y ONGs realizan el Proyecto "Viabilização de um Sistema de Coleta Seletiva e Reciclagem em área carente" (PAPES – LIXO) en ocho comunidades de Manguinhos bajo la dirección del profesor Szachna Eliasz Cynamon. Las acciones de educación ambiental y organización de la cooperativa COOTRAM, se propusieron mejorar la calidad de vida y los bajos ingresos de la población (Randock & Kligerman, 1995).

En la ciudad de Belo Horizonte la organización de los badameiros en la Asociación de recogedores de papel, cartón y materiales reciclados (ASMARE) con el apoyo del ayuntamiento y actualmente de la UNICEF ha integrado socialmente estos trabajadores. Dicha asociación dispone de un taller de reciclado y ha promocionado cursos a sus asociados, permitiéndoles nuevas oportunidades de empleo. La ASMARE tiene 346 familias asociadas, un total de 1.500 personas (Peixoto, 2001).

Al nordeste del país, el Estado de Ceará há creado incentivos fiscales y condiciones propicias al desarrollo del pólo de industrias recicladoras (CEMPRE. 2001). El Sindicato de empresas de Reciclagem de residuos sólidos domésticos e industriales del Estado de Ceará con la participación de Serviço de Apoio a Pequena e Media Empresa (SEBRAE) y de la Federação das Industrias de Ceará (FIEC) han organizado los seleccionadores de reciclado en centros comunitarios localizados en la periferia de la ciudad.

En ciertas comunidades más pobres el reciclado de materiales se encuentra entre las actividades generadoras de ingresos que son estimuladas por distintas organizaciones.Una parcela significativa del papel reciclado en Brasil es importada y solo hace pocos años las instituciones públicas han iniciado la recolección selectiva del papel, algunas de estas instituciones han estimulado cooperativas y asociaciones en la realización de la actividad.

En Salvador se ha multiplicado la actuación de asociaciones y otras entidades de carácter humanitário en comunidades com carencias. La CAMAPET (Centro de Artes e Meio Ambiente) que surgió de la asociación de vecinos en el barrio de Alagados, desarrolla en su oficina actividades de aprovechamiento del plástico. También con el apoyo de una ONG se ha formado la cooperativa Recicla Comércio de seleccionadores, que desde hace muchos años recogen el papel del centro financiero de la ciudad. La cooperativa COOPCICLA recoge el papel (96%) del Centro Administrativo da Bahia (CAB). La Asociación de comunidades Paroquiais de Mata Escura e Calabetão (ACOPAMEC), ha iniciado la recolección selectiva en la Base Naval da Marinha localizada en el Puerto de Aratu en Salvador. La actuación de estas ONGs ha sido destacado por las acciones desarrolladas de conscienciación ambiental, y de generación de ingresos para la población; también se va por la organización cooperativa y la participación ciudadana que dan como resultado un cambio de calidad de vida de las comunidades carentes. En la programación de la administración municipal la ampliación de la recolección selectiva derivará de una asociación con los agentes sociales involucrados con la recogida de materiales reciclados en áreas com carencias.
 

El sistema de recogida selectiva de basura en la Ciudad de Salvador

En Salvador desde hace muchos años la recuperación de materiales secundarios procedentes de los residuos sólidos municipales es practicada por personas que buscan una fuente de ingresos. Son trabajadores del sector informal que de puerta en puerta compran ó reciben sin coste papel, botellas y metales; y trabajadores del servicio de limpieza urbana que rebuscan entre los residuos recibidos en la recogida (BID, 1996, p.159). También es frecuente la presencia de personas en los vertederos no clausurados, seleccionando entre los desechos los materiales para venta o para el consumo propio. Todos ellos forman parte del sistema de reciclado que hay en la mayoría de los países con niveles de pobreza urbana acentuados.

En Salvador la recogida selectiva de la Cooperativa de Reciclado (COOPCICLA), ha empezado en 1997 con las inversiones del Proyecto Metropolitano que incluían la construcción del depósito de selección y almacenamiento, la adquisición de los equipamientos de recogida y el entrenamiento de los seleccionadores de residuos. La cooperativa dispone de dos maneras de recoger el material reciclado: el procedente de la  Central de Badameiros y el de los seleccionadores callejeros. En la concepción del sistema se han tomado en cuenta los aspectos culturales de la población, permitiendo que los seleccionadores de residuos recogieran en los domicilios los materiales ya separados por la población. Además, el ayuntamiento reactivó la Central de Badameiros de Canabrava (CENBA) que selecciona los residuos de origen comercial y domiciliario en un área restringida del vertedero de Canabrava.

En el año de 1998, la basura para ser reciclada recogida con destino a dicho vertedero fue de 1.l71.389 toneladas. De este total la Central de Badameiros (CENBA) ha aprovechado el 8,1 por ciento, es decir 5.021 toneladas al año representando 2,0 kg por habitante al año, un valor aún insignificante de reciclado, sí lo comparamos con el de las ciudades europeas. Los materiales colectados en la CENBA fueron aluminio, vidrio, plástico, metal y papel; este último representó casi el 70 por ciento de la recogida selectiva (cuadro 1).
 
 

La COOPCICLA viene reciclando en el origen un total de 664 toneladas al año, lo cual representa menos de 0,5 kg por habitante al año, cifra también insignificante con relación a la que Barcelona recicla con sus contenedores. En dicha ciudad, por citar algunas cifras representativas, en 1991 había una recogida selectiva con un valor de 10 kg por habitante/año y el año 1996 aumentó a 17 kg por habitante al año.

Sin embargo no podemos aceptar estos datos como referentes al total de lo que es rescatable en la ciudad de Salvador. La cooperativa recibe el reciclado recogido en la Central de Badameiros y en algunos barrios de la ciudad. Los materiales, papel, vidrio y aluminio, recogidos por seleccionadores no vinculados a la cooperativa no está contabilizado por el sistema cooperativo (cuadro 2).

En el año de 1995 la recogida selectiva de COOPCICLA tuvo un descenso de 23,56 por ciento, lo que indica la baja participación del programa con relación a los chatarreros y empresas que actúan en el sector. La Central de Badameiros concentra la mayoría de los badameiros, por lo tanto el volumen de reciclado alcanza las mayores cifras: el 82,49 por ciento del total del reciclado, mientras que la recogida en el origen realizada en algunos barrios de la ciudad aún es poca expresiva, con el 17,21 por ciento del total. El estudio desarrollado por SEBRAE (1995) sobre el reciclaje en Salvador observa que el volumen total estimado de productos reciclados comercializados, considerando los diversos agentes, públicos y privados, involucrados en la actividad, alcanza la cifra de 11,7 por ciento.
 
 

Actualmente en los países desarrollados la segregación selectiva en la fuente domiciliaría generadora es el método de reciclaje más empleado que requiere la participación de la comunidad. Pero la práctica más común en las ciudades brasileñas y en la mayoría de las ciudades latinoamericanas, es la separación en los vertederos. La desocupación y la pobreza hacen la diferencia, generando la existencia de seleccionadores en los vertederos no clausurados. Con la clausura de los vertederos este grupo social deberá hacer la recogida en las calles; no obstante estos trabajadores se sienten amenazados en el ejercicio de su actividad ya que las administraciones públicas no disponen de un sistema de segregación en el origen. El acopio de los materiales en las calles es la alternativa que queda a estos trabajadores que en muchas ciudades tienen la indiferencia de los órganos gubernamentales y los prejuicios de la comunidad. El apoyo de entidades civiles y no gubernamentales en la organización de estos seleccionadores de basura en cooperativas y asociaciones ha contribuido a que actuaran en el mercado como profesionales. Organizados consiguen mejores precios en el mercado y el reconocimiento de la actividad por parte de las administraciones municipales.

La presencia de los chatarreros recogiendo cartón/papel, vidrio y metales por las calles de Salvador es antigua, ya que viene desde el siglo pasado. Con el inicio de la recogida de la basura en camiones, parte de las chatarras pasaron a ser recogidas en los vertederos lo que condujo a los seleccionadores de las calles hacia los vertederos. El análisis del ciclo de comercialización del reciclaje de materiales revela una cadena de intermediación distribuida en: badameiros que recogen el papel/cartón, metal y vidrio, los intermediarios que son, también aquí, los balanceiros y los chatarreros constituidos en pequeñas empresas que adquieren de otros y venden a las industrias de reciclado (SEBRAE, 1995). Parte de la recogida selectiva de materiales para reciclaje es hecha por empresas que recogen en los establecimientos comerciales, industriales y de servicios. Los demás son chatarreros que seleccionan en las calles y en el vertedero de Canabrava.

En el año de 1997 juntamente con la Companhia de Desenvolvimento da Região Metropolitana de Salvador (CONDER), se hizo un nuevo empadronamiento de los badameiros y se retomó el proyecto de promoción social (LIMPURB, 1997). De poco más de 1.000 badameiros que trabajaban en Canabrava solo quedaron 266 personas. Los niños y jóvenes de siete hasta los diecisiete años fueron a las oficinas de aprendizaje profesional y cultural, construida cerca del vertedero, donde reciben alimentación y una ayuda financiera⁽¹⁾. Aquellos entre 18 y 46 años, un total de 155 personas, fueron incorporados en las empresas de limpieza urbana. Los demás tienen problemas de salud o edad avanzada y no pudieron emplearse.

Las mujeres y los niños resultan muy afectados por la ausencia del saneamiento del barrio; debido a la pobreza en el lugar, las águas residuales y las inmundicias son vertidas en las orillas de los ríos, que frecuentemente se llenan, encharcando las calzadas. Por tener la responsabilidad principal de las tareas del hogar, actividades que las mantienen dentro de la casa la mayor parte del tiempo, las mujeres son más vulnerables a las enfermedades. En esos lugares en que el saneamiento es precario, las actividades domésticas se ven afectadas por las inadecuadas instalaciones de lavado y por la contaminación del água (Naciones Unidas, 1998). Pero no es la pobreza la causa del deterioro ambiental; el vertedero es el principal factor de la degradación ambiental, con los frecuentes incendios, humos y el tráfico intenso de vehículos dañando las vías de circulación. Se observa es la relación inversa entre la calidad de los servicios de alcantarillado, la eliminación de la basura y los ingresos de la población. La relación entre pobreza y degradación ambiental se refiere más a la vida urbana en las ciudades dónde se acentúan las malas condiciones de saneamiento (Naciones Unidas, 1998).

En el vertedero de Canabrava las mujeres juntamente con sus hijas mayores recogían alimentos deteriorados para satisfacer las necesidades alimentarias de la familia. Esas actividades reducen significativamente el tiempo de la mujer para las actividades de recogida de los reciclados, a la vez que las exponen a riesgos de salud. Además las niñas y niños suelen tener que ayudar a sus padres a recoger los reciclados lo que les impide estudiar.

El estigma de la actividad es enorme, incluso en el propio barrio. La comunidad tiene una percepción negativa de la basura mientras la percepción de los badameiros sobre el vertedero es positiva y creen que sus ingresos son superiores a los que trabajan en la ciudad por un salario mínimo (Moura, 1990)⁽²⁾. Los badameiros piden el derecho a ser reconocidos como "parte de la ciudad," con una identidad profesional ya que ésta actividad representa un beneficio económico y ambiental a la administración local, así que estos beneficios sean extensivos a ellos.

En la actualidad con la clausura parcial del vertedero de Canabrava, esta población no ha dejado de trabajar en este lugar. La construcción del nuevo vertedero sanitario aún no ha cambiado la calidad de vida de la población del barrio, puesto que los badameiros organizados en la COOPCICLA siguen recogiendo los materiales en Canabrava en una zona reservada. Los planes para el antiguo vertedero darán inicio a un nuevo uso, que suele ser una planta de reciclaje, un parque o un aparcamiento. Cualquiera que sea la alternativa adoptada queda claro para la administración local la necesidad de la inserción de estos trabajadores en el sistema de reciclado.
 

Conclusión

La mayor parte del reciclado de la ciudad de Salvador es realizado todavía hoy espontáneamente por una población desempleada que encuentra en la recolección una alternativa de ingresos. Esta actividad se encuadra en una economia informal que tiene como incentivo para los recolectores el pago que ofrecen ciertas empresas recicladoras por el producto, sin existir una intervención pública. La ampliación del programa de recolección selectiva implica la adopción de una gestión integrada que establezca una política pública que incorpore estos trabajadores al sistema de residuos urbanos, además de reconocer como actividad laboral.

Para que la innovacción tecnológica esté al servicio del desarrollo humano y no al revés es fundamental la capacidad de innovar y adaptar, teniendo como base el contexto político-social. Así que en la gestión ambiental de los residuos hay que combinar las estrategias sociales y las tecnológicas en las distintas formas de tratamiento. Por otro lado es inegable la necesidad de formar y capacitar los recursos humanos para innovar, adaptar y regular, formulando políticas amplias que reflejen las necesidades locales sin excluir el contexto global.
 

Notas

(1) El proyecto socio educativo de jóvenes y menores de Canabrava funciona a través de Fundação Cidade mãe y Limpurb y recibe el apoyo de UNICEF, Secretaria do trabalho e Ação Social-SETRAS, Liga de Assistência e Reintegração-Lar, Anistia Internacional y empresas privadas. Los 120 alumnos entre 7 a 17 años, todos ellos reciben una beca-escuela alimentación, transporte, asisten a conferencias y participan de talleres de teatro, cerámica, capoeira, danza, artes plásticas, jardinería además de cursos profesionales.
(2) La equivalencia en euros del salario minimo en Brasil es de 75 a 80 euros.
 
 

Bibliografia

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© Copyright Hilda Maria de Carvalho Braga, 2002
© Copyright Scripta Nova, 2002
 

Ficha bibliográfica

BRAGA de CARVALHO, H.M.El trabajo de los badameiros: superando los umbrales de la miseria.   Scripta Nova, Revista Electrónica de Geografía y Ciencias Sociales, Universidad de Barcelona, vol. VI, nº 119 (34), 2002. [ISSN: 1138-9788]  http://www.ub.es/geocrit/sn/sn119-34.htm
 

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