DE LOS ASTROS TEMPORÁNEOS Y COMETAS

 
En diversos tiempos han aparecido algunos astros que después se desvanecieron, por lo que se llaman temporáneos y son en dos maneras: unos se dicen estrellas nuevas y otros cometas.

Las estrellas nuevas son de la misma naturaleza que las fijas y tienen el mismo movimiento, distando siempre de la Tierra más que Saturno, por ser su paralaje insensible; el aparecer estos astros puede consistir en que por algún tiempo se acercan más a la Tierra, y después alejándose, desaparecen. En el año 1572 apareció en Casiopea una estrella fija de la magnitud de Venus por espacio de dos años y después desapareció; fue observada por Ticovrae y los astrónomos de aquel tiempo. En el año 1600 apareció por algunos días otra nueva estrella en Cisne. El año de 1604 apareció otra en Serpentario y fue visible un año.

Los cometas son otra especie de astros, opacos como los planetas, que no tienen otra luz que la que reciben del Sol, cuyos cuerpos pueden producirse por la unión y combinación de algunas partículas de la esfera planetaria, que en teniendo la competente disposición para reflectar la luz, se hacen visibles y, en perdiendo esta disposición desaparecen; de éstos han aparecido en diversos tiempos.

Uno apareció el año de 1580 desde principio de octubre hasta mediados de diciembre, según su paralaje le puso Tycho sobre la Luna, pero Maestlino sobre Saturno; otro apareció en primero de marzo de 1582 hasta mediados de abril; otro en 1587 desde 16 de julio hasta 9 de agosto y le constituyeron sobre el Sol; otro observó Keplero sobre la Luna en 1607, y en la misma distancia se observó otro desde 27 de noviembre del año 1621, hasta 22 de enero del siguiente año.

Según las diversas figuras en que aparecen se dicen unos, caudatos o con cola, otros barbados y otros consignados o capilados. Los caudatos o con cola son cuando los rayos de luz que salen del cometa son largos; las colas son de varias figuras: unas terminan en punta como pirámide cónica, otras se esparcen hacia diversas partes ensanchándose hacia el astro, otras son en línea recta y otras en curva.

Los barbados son cuando los rayos de luz anteceden a la cabeza y son más cortos.

Los consignados, cuando los rayos de luz ciñen al cometa por todas partes y le circundan lo mismo.

Muchos filósofos antiguos y astrólogos hacen pronósticos de la aparición de los cometas, ya funestos como de muerte, guerra, peste y hambre, ya alegres como victorias, nacimientos de príncipes, etc., pero en la realidad nada pronostican por ser efectos naturales, y se tiene por experiencia que después de estos fenómenos no han sobrevenido cosas notables y así se tienen por delirio de la vulgaridad.

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